Hace dieciséis años empecé una nueva etapa profesional como independiente y así espero estar hasta que me muera, porque no tengo intención de jubilarme. En los dos o tres últimos años he tenido la sensación de que me estaba estancando, pero como suele ocurrir, es más difícil salir de una etapa de meseta que de otra más agitada. Así que, ha tenido que llegar la pandemia para darme un empujón
Archivos de autor: Andrés Pérez Ortega
23 de Junio, casi sin darnos cuenta, la próxima semana estaremos en Julio. Eso significa que, como en años anteriores, dejaré de escribir en este blog hasta Septiembre y me centraré en crear cosas nuevas. Creo que este paréntesis es algo necesario, especialmente este año, porque lo que ha ocurrido en estos meses no me ha generado una impresión positiva de lo que percibo. Y eso se nota en mis
Lo reconozco, no sé si estos meses me han hecho más fuerte, lo que tengo claro es que me han vuelto más escéptico todavía con respecto a lo que puedes esperar del entorno. Siempre he sido una persona independiente y he tratado de evitar que las decisiones ajenas, las que desde los gobiernos se venden como «sociales», me afectasen demasiado. Lo que hemos visto estos meses es todo un festival
Este fin de semana he descubierto y disfrutado una miniserie documental en el canal Disney sobre la gente que ha dado forma a sus parques temáticos. Los denominaron Imagineers porque son una combinación de gente imaginativa e ingenieros. La serie es muy entretenida y engancha desde el primer minuto. Aunque es verdad que a mi siempre me ha encantado mirar por detrás de las bambalinas en cualquier tema. Para alguien
¡Ya está bien! Ayer dijeron que eliminaban Lo que el viento se llevó de una plataforma digital por racismo. Hace unos días, una guionista de Friends pedía perdón por la falta de diversidad de la serie. ¿Qué vamos a tener que hacer a partir de ahora? ¿Tengo que esconder mi ejemplar de Lolita de Nabokov? ¿Debo romper los discos de la Orquesta Mondragon de Ellos las prefieren gordas o el
Hubo un tiempo no muy lejano en el que más o menos se podía salir adelante sin pensar demasiado hacia donde dirigirte, sin tener una estrategia ni un plan. Pero creo que eso se ha terminado. Ahora debemos ser mucho más cuidadosos con los recursos disponibles, especialmente si hay gente a tu alrededor que depende de lo que hagas. Y eso implica tomar mejores decisiones. He dicho muchas veces en
Hace unos días, Elena Gomez del Pozuelo preguntaba en un tuit si merecía la pena soportar las críticas y los disgustos por meterte en temas ajenos a tu profesión, especialmente cuando se trata de opinar sobre política. Sobre lo de opinar y defender tus valores públicamente ya he hablado aquí en varias ocasiones y mi postura está clara. Creo que si no defiendes aquello que crees y que forma parte
Suelo insistir en que la mejor forma de aprender sobre Branding Personal es observando los comportamientos de otras personas. Si, además, llegas a conocer sus motivaciones, sus objetivos y su propósito, tendrás muchas de las piezas que les hace ser como son. Esto es mucho más fácil si analizas a personas que ha dejado huella, es decir, leyendo sus biografías o viendo documentales sobre su vida. Este fin de semana
La semana pasada, por fin, retomé mis paseos matutinos de antes de ponerme a trabajar. Los echaba mucho de menos porque son mi principal fuente de ideas. Lo que me preocupó/cabreó fue ver no menos de una docena de mascarillas y guantes por el camino. Y así todos los días. Ayer por la tarde salí a dar un paseo con la familia y vi las terrazas de los bares llenos
Suelo utilizar una fórmula ultrasimplificada de mi modelo para explicar las tres patas fundamentales de una Marca Personal. Lo llamo RECONO o fórmula del RECONOcimiento. Es el producto de tres factores: RElevancia: Es la utilidad de lo que haces, el valor o el beneficio que proporcionas. Si no eres capaz de generar un cambio positivo, entonces esta variable carece de valor. COnfianza: Es la capacidad de conseguir que la gente